Crisis en la UCR: Joven dirigente denuncia maniobras para reducir la participación interna
Un emergente dirigente radical denuncia maniobras administrativas destinadas a concentrar el poder en la UCR, en medio de una crisis de identidad del partido frente al avance libertario. El caso expone las tensiones entre la renovación y el establishment partidario.

Ramiro Passo, joven dirigente radical, denuncia irregularidades en la conducción partidaria de la UCR
Tensiones internas evidencian el desconcierto del radicalismo ante el avance libertario
El dirigente radical Ramiro Passo, de General Pico, ha denunciado irregularidades administrativas que revelan una presunta estrategia para concentrar el poder dentro del histórico partido de Alem, en medio de la creciente influencia de La Libertad Avanza en el escenario político nacional.
'El radicalismo tiene un problema administrativo que es parte de una decisión política de que sea un partido cada vez más chiquito, donde los tres o cuatro que lo conducen tienen chances de decidir como quieren', señaló Passo en declaraciones contundentes.
Maniobras burocráticas contra la democracia interna
La Junta Electoral del partido rechazó la lista presentada por Passo mediante procedimientos cuestionables, incluyendo demoras injustificadas y argumentos técnicos débiles sobre la antigüedad de afiliaciones.
El incidente expone las graves deficiencias administrativas del partido:
- Pérdida sistemática de fichas de afiliados
- Padrones desactualizados
- Extravío de actas partidarias
- Incumplimiento de plazos estatutarios
Crisis de identidad ante el fenómeno libertario
El episodio revela un partido histórico en crisis, con dirigentes desorientados ante el ascenso de nuevas fuerzas políticas. La eliminación de las PASO ha agravado la situación, beneficiando a las estructuras tradicionales y limitando la participación democrática.
'El partido llegaba a un proceso electoral sin candidato, sin mensaje y con sus referentes desorientados porque quieren ir cerca de La Libertad Avanza, que no tienen nada que ver con nosotros', advirtió el dirigente.
Desafío a los valores tradicionales del radicalismo
Passo enfatizó que estas prácticas contradicen los principios históricos del partido: 'El radicalismo tiene como bandera histórica la calidad institucional, y si perdemos eso, en definitiva, perdemos nuestra historia'.
El dirigente confirmó que volverá a presentar su lista en agosto, desafiando las restricciones impuestas por la actual conducción partidaria.